domingo, 30 de septiembre de 2007

El Santo Cónclave más largo del mundo (1)

Hola de nuevo modernas!

Obviando los siglos que han pasado desde la última actualización paso a relatar los acontecimientos acaecidos en el pasado Santo Cónclave celebrado en Londres.


Battersea Power Station un Must en cualquier viaje a Londres


La llegada al hostal fue confusa ya que la recepción del mismo estaba dentro de un pub regentado por un inglés socarrón que nos traía a todas locas, sobre todo a Kiki, a la que se le hacía el culo pesicola cada vez que le veía. Lo mejorcito del hostal, aparte de los dos camareros, fueron los compañeros de cuarto que se sucedían como rayas de cocaína en una fiesta en casa de Kate Moss.

Repugnancia la Sucia (familiarmente conocido como Repu). El preferido por las suizas. Imaginad una montaña de ropa sucia, al hombre menos atractivo de Inglaterra durmiendo con calcetines y en ropa interior, prendas de Quicksilver a cascoporro, poca higiene corporal… Ahora dejad de imaginar.

Eva Longoria (lease Ifa Longoria). Pequeñita, trendy, guapa y más hermética que una ex novia de Guille Milkyway.

Eric (El Marine). Posiblemente un infiltrado del gobierno Bush para investigar los potenciales actos subversivos de las suizas. Parecía de entendimiento limitado hasta que le vimos echar fichas a Ifa.

Los Mariquitillas Holandeses. A primera vista nos parecieron los dos guapos, luego solo uno, luego el otro. Muy callados, muy a su rollo. Que morbo, que poderío.

Las Tortilleras Danesas. Versión nórdica y un poco más femenina de los Mariquitillas. Vinieron, hicieron la tijera y se fueron. Una era calcada a Anabel Alonso pero en plan pavisoso.

Las Americanas. Por lo que pudimos hablar con la cabecilla del grupo, que residía en Madrid, eran probablemente todas de California, probablemente todas rubias de bote y probablemente todas prostitutas. Se pusieron a beber chupitos como locas en la habitación justo el día que nosotras dormimos 3 horas. La Hembra Alfa empapada de la cultura ibérica nos dijo sonriendo que seguro que no nos importaba porque en España hacemos botellones. Literal. La miramos sonriendo y repitiendo mentalmente gorda gorda gorda gorda gorda.


Continuará...