Con bolso y a lo loco

Queridas amigas:

He aquí la saga de aventuras de un par de modernas por el Benelux.

Leuven se convirtió en nuestra residencia habitual. La anfitriona, como toda fiesta trendy debe tener, fue la Chama que está desarrollando su vida erasmusil en susodicho lugar. Junto con nosotras, viajó desde tierras castellanas la Taci, amo y señor de la Chama. Para horror nuestro, el loft carecía de colchones, por lo que Kiki y servidora tuvimos que dormir en el suelo de linóleo. Menos mal que era blandito!!

Los días nos les repartimos con viajes varios. Nada más llegar visita a Leuven, nuestro centro neurálgico del viaje. Ciudad universitaria pero de las buenas (me río yo de una tal Salamanca). Para empezar el medio de transporte de las masas era la bici. Como una es moderna, no pudo resistir la tentación de andar en bici sola, con mapa en el bolso, durante un mañana. Por supuesto visita al jardín botánico, que para eso soy una florista. Experiencia la de la bici que recomiendo al populacho. Qué avanzada está esta gente, queridas! Gótico civil a diestro y siniestro.

A los dos días nos desplazamos a la capital de la droga y el sexo holandesca. Ámsterdam es un passadda!. Se lo recomiendo a cualquier coolhunter que se precie. Museo Van Gogh, Casa de Anne Frank, galería con obras de David LaChapelle, callejeo y más callejeo… Pero de repente algo vislumbró Kiki que la hizo gritar: -¡Viktor & Rolf!, ¡Viktor & Rolf!, ¡Viktor & Rolf! -¡¡Mira, la sede central, Artis tía!! Qué alegría, qué alboroto! Estábamos que nos meábamos en las bragas. Fotos y más fotos. - Esto tiene que quedar para la posguerra!- Tentadas estuvimos de practicar la Ceremonia del Té con ellos. Hubiera sido un exitazo.

Próximo proyecto en el que colaborarán V&R.

Por el resto, mercadillos de ropa de 2ª mano donde no daba crédito a la cantidad de cosas que veía y me perdía al mismo tiempo. Kiki cargó con un reloj ruso de bolsillo con cadenita y todo. Por mi parte un bolso de Louis Vuitton, que llevaba en búsqueda siglos ha. Anda que no vamos a fardar de modernas ni ná en nuestro pueblo!.

Después del clímax alcanzado, Bruselas se nos quedó corta, salvando el “Niño pis” y las tiendas de chocolate (aaaahh!!!). Sería debido al cansancio acumulado de días dormitando o a los ruidos nocturnos y taciturnos que se podían escuchar en el loft por la noche, pero las tapas de nuestros tacones se nos quedarón allí de lo poco que levantábamos los pies. Hay que ver cómo les gusta el gótico a esta gente.

Por el resto, mucha y mucha y mucha cerveza, reducción de comidas a una al día, robo de pegatinas de las farolas, estancias en bares, viajes en tren rozando el peligro, cara de asombro por la cantidad de monumentos andantes autóctonos (¿Se dejarían tocar? Habría que haber probado) gritos de Guapo! Guapo! a cualquier viandante varón y rubio (una no está pa desperdiciar el tiempo) sol, lluvia, nubes…

Y con esto nos llegó el fin de la tournée. Muchas gracias por acogernos Chama!!! Por cierto, cuando vengas te llevamos a comer cecina de León (pero del animal) jejeje...

Trip song: What Katie did – The Libertines
Mood: Soy una jóvena pegada al pañuelo, del catarro que me traje de allí.

P.D.: Aclaro que la visita a un Coffee-shop amsterdiense (el Barney's) se realizó con éxito. Kiki lía petardos como una campeona. Dar un paseo en Ámsterdam y encontrarte una bolsa llena de las flores de una planta que se fuma, no tiene precio (la suerte de la fea la guapa la desea). Miles de “Palacios del Porno” en el Barrio Rojo y consoladores que ya desearía la Obregón…